Alegrías y tristezas

Cuando hoy abrí mi correo luego de dos días, me encontré con el mail de Georgina, y el de varias amigas blogueras que me felicitaban por haber ganado uno de los premios del Sorteo. Y saben una cosa???   Ayer fue mi cumpleaños, pero no pude hacerlas partícipes de mi festejo porque estoy pasando unos días un poco tristes: Mi abuelita Huri está internada, y desde el martes paso largas horas cuidándola. Ella me reconoce, pero  piensa que está en su casa, entonces charlamos sobre todo lo que cosió ese día, los tallarines que va a amasar, la comida que le va a preparar a mi abuelito... cosas que formaban parte de su vida cotidiana de hace ya muchos años.

Mi perrita Juani está enferma también, y esta semana el tiempo que me restaba de estar en el sanatorio, lo pasé en la veterinaria, haciéndole ecografías, radiografías, análisis... resultó ser que tiene artrosis en la columna, y le duele. A mi se me juntaron las dos cosas, se me removieron un montón de emociones, y ando hecha una tonta que llora por los rincones, preguntándome todo el tiempo cómo se desapega uno de los seres que ama.

El premio de Georgina no es una casualidad, es un regalito para mi alma en el día de mi cumpleaños 45; y más que el regalo material que sin duda será precioso, me llena el corazón el cariño de Georgina, y el cariño de todas las que vienen a dejarme mensajitos de que se alegraron porque yo haya sido la ganadora.

¡¡¡Gracias chicas!!!  porque las siento tan cerca, y contarles mi pequeña tristeza me hace alivianar mi corazón. También agradezco las palabras que recibí por el tutorial.

Las quiero y me hace bien tenerlas tan cerca, un beso enorme y sincero a cada una desde el fondo de mi corazón!!!